Terapia de Reparación.

La terapia de reparación en nuestro Centro es entendida como terapia de resignificación, y ésta es recomendada en caso de maltrato grave y/o en casos de abuso sexual, hacia niños, niñas y jóvenes, que se consideran como una vulneración grave a la integridad de éstos, y que pueden llegar a constituir delito.

La resignificación implica un cambio en torno al significado que el paciente da a la experiencia vivida, incorporando nuevos contenidos que contribuyan a una comprensión del acontecimiento que sea más adaptativa y favorezca la coherencia interna, en la medida que no se constituya en el núcleo central de la vivencia del sí mismo, pero sí sea integrada dentro de la historia vital.

Así, la resignificación, en las agresiones sexuales, implica que la persona que ha sido víctima, desde un rol activo, pueda elaborar la experiencia abusiva, integrándola a su historia vital al darle un nuevo significado a ésta (resignificación) de una manera adaptativa. La terapia se orienta a que la persona que ha sido víctima pueda expresar, explorar y elaborar los conflictos asociados a la experiencia abusiva vivida, integrándola como una experiencia negativa de su vida, pero como una más dentro de un conjunto de ellas que por sí sola no determina su futuro ni la visión de sí mismos (Capella, 2007, 2011; Capella & Miranda, 2003; Capella et al., 2008;). Es decir, implica poner la experiencia de abuso en perspectiva dentro de la propia vida, reconocerlo como un hecho de la propia vida, pero no como toda la vida (Martínez, 2012).